"La callecitas de buenos aires tienen ese:
qué sé yo....viste?"
Carlos Gardel
Mi ciudad, una ciudad fria y sin aspiraciones. No pretende ser nada y sin embargo lo es. Una "nevera" muy tibia y agradable por el clima de su gente. Tarde medio nublada y cielo medio triston, olor a dulces sueños y al adios que por el aire vuela sin tiquete de regreso ni posibilidad de un "hasta luego". Tu en la ventana y yo escondido en aquel callejon. Prostitutas sin sueños condenadas a su suerte e indigentes sin futuro, con un presente turbio y un pasado innombramble. Politicos miserables entregados a sus frustraciones; comerciantes tan charlatanes que convencerian al mismo Dios -si es que existe- de cambiar el mundo entero por un hueco sin sentido. Tu aún en la ventana y yo una ilusión más cerca de tu casa. Brujos y chamanes que leen hasta los calzones y uno que otro desocupado, vago sin corazón que anda pidiendo limosna con un niño entre sus brazos. Contadores, medicos, administradores y abogados que corren de un extremo a otro de la ciudad buscando "llegar" sin saber a dónde, solo "llegar".
Tu aún en la ventana y yo llorando bajo ella la desgracia de no tenerte.
Adiós
